Las víctimas de las criminales balas perdidas: Autoridades denuncian falta de personal especializado

Antonio Yáñez, hombre de 60 años, se encontraba conversando con su familia afuera de su casa en la comuna de La Pintana. Uno de sus nietos jugaba al lado de él, y cuando nadie lo esperaba, la víctima sintió el golpe con un profundo ardor en su rostro. En la actualidad, el hombre continúa con una fractura de mandíbula y con la bala alojada en su cuello, pero una peligrosa intervención quirúrgica podría ayudar a sacarla. En ese sentido, es relevante mencionar que Antonio vive solo a dos cuadras de la familia de Dylan, pequeño de ocho años perdió la vida por una bala percutada. Dicho problema, no es exclusivo de La Pintana. Pedro Aguirre Cerda vive una situación similar en sus calles. Por su parte, el alcalde de la comuna, Luis Astudillo, asegura que como administración han hecho "todo el esfuerzo" para combatir la delincuencia, pero que no "tienen los medios" para hacer frente a la problemática. Incluso, según indica el edil, muchos vecinos y vecinas han optado por vender sus viviendas. Con relación a las trayectorias de los proyectiles balísticos, según indican los especialistas, si alguien dispara una bala de 9 milímetros en un ángulo de 45 grados hacia el cielo, ésta podría alcanzar una velocidad de 350 metros por segundo, y recorrería una distancia de aproximadamente 2.300 metros.

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