Hoy la imputada identificada como Sonia del Carmen Paillao Calfucura se encuentra en prisión preventiva por el asesinato de su propio hijo, Marco Antonio Cantillana Paillao.
A mediados de enero se conoció una noticia que impactó a nivel nacional, ya que la Fiscalía Metropolitana Sur investigaba un parricidio, por la muerte de un joven que llevaba más de seis años tetrapléjico tras ser baleado por dos sujetos en diciembre de 2018, el mismo día de su cumpleaños
Hoy la imputada identificada como Sonia del Carmen Paillao Calfucura se encuentra en prisión preventiva por el asesinato de su propio hijo, Marco Antonio Cantillana Paillao.
Marco fue asesinado el mismo día que volvió a su casa, donde solo alcanzó a estar cerca de siete horas. Antes había estado casi cuatro años al cuidado de una amiga.
Margarita y Marco se conocieron hace cuatro años cuando ambos estaban hospitalizados y desde ahí nació una fuerte amistad.
"Yo desde un principio lo admiré a él. A mí me dijeron que tenía insuficiencia cardíaca e hipertensión pulmonar, y el me dijo: 'Mire como estoy yo y no me quejo, yo sigo batallando", comenzó señalando Margarita a CHV Noticias.
Margarita le hizo una pieza-hospital en su casa y se llevó al joven a vivir con ella y lo cuidó por años, pero no podía seguir, ya que debía someterse a una operación, por eso le pidió a Sonia, la madre, que cuidara al joven por un tiempo.
"Me dijo que no lo iba a cuidar tanto tiempo, que tenía cosas que hacer y se iba a ir de vacaciones... Nunca me ayudó económicamente en cuatro años y vino solo una vez a verlo. Marco una vez me dijo que su mamá le había pegado unas cachetadas porque ella llegaba curada y se ponían a discutir", agregó.
Por último, la mujer afirmó: "Él me decía que yo era su ángel de la guarda, siempre me daba las gracias, hasta el último día. Espero que ella pague, porque yo me saqué la cresta y me dejó coja, porque Marco fue mi pilar, mi fuerza, él me decía que yo tenía que batallar... y no merecía morir así, nadie lo merece".