El pequeño tenía un popular coyac en la boca, el cual le provocó una fatal asfixia pese a los intentos de reanimación de los propios funcionarios del establecimiento.
Una trágica situación ocurrió en las últimas horas en Córdoba, Argentina, luego de que un niño de solamente 10 años falleciera tras atragantarse con un dulce cuando estaba en el recreo de su colegio.
El hecho se dio específicamente el pasado 29 de junio, donde el pequeño estaba consumiendo un popular coyac mientras estaba corriendo por el patio del establecimiento.
El joven lamentablemente se cayó y el chupete, que aparentemente tenía el palito cortado, se atoró en su cuerpo. En ese momento, funcionarios del lugar le hicieron rápidamente maniobras de rehabilitación y llamaron a una ambulancia.
Tras ser internado y luchar dos días por su vida, finalmente el menor de edad murió este viernes 1 de julio producto de que la golosina le obstruyó las vías respiratorias, lo que le provocó una asfixia.
Medios locales aseguraron que, en el traslado al hospital, el niño sufrió de al menos dos paros cardiacos, entrando inmediatamente a la Unidad de Cuidados Intensivos para ser operado de urgencia.Pese a los intentos de los médicos y a poder sacarle los restos del dulce de la garganta, el pequeño no pudo resistir y el deceso fue confirmado tanto por los especialistas y por el colegio.