Familiares, amigos y autoridades regionales piden cadenas de oraciones y donadores de sangre para Camila Rivera Tapia, quien se mantiene hospitalizada tras complicaciones a días del nacimiento de su hija.
La delegada presidencial de Arica y Parinacota, Camila Rivera Tapia, atraviesa un delicado estado de salud tras tener complicaciones después del nacimiento de su hija.
A través de un comunicado difundido en las redes sociales de la Delegación, la familia de la autoridad regional pidió "acompañarnos con sus oraciones, buenos pensamientos o energías -según sus creencias- que lo hagan con esperanza por su pronta recuperación".
"Agradecemos profundamente las múltiples muestras de cariño, apoyo y preocupación que hemos recibido por parte de la comunidad y de diversas autoridades", agregan.
Samuel Pozo, esposo de la delegada, se sumó a las peticiones en su cuenta de Facebook: "Tengo mi fe intacta. Confío en Dios que está contigo caminando de la mano, nosotros acá te esperamos siempre, cada oración levantada, buenos deseos y pensamientos nos ayudan a seguir adelante en este nuevo desafío".
"Sé que lo vas a lograr porque eres una negra fuerte, dura, constante, motivada y cristiana y lo principal es que caminamos de la mano de Dios todos los días", agregó Pozo.
Camila Rivera, de 37 años, dio a luz la semana pasada mediante cesárea. Sin embargo, su salud se deterioró durante el fin de semana, lo que derivó en su ingreso de urgencia el domingo al Hospital Regional de Arica Dr. Juan Noé Crevan.
A través de redes sociales, familiares, amigos y medios locales reportan que se necesitan al menos 30 donadores de sangre Tipo O+ para la delegada.
La autoridad regional es abogada de la Universidad de Tarapacá. Entre marzo de 2022 y noviembre de 2024 se desempeñó como Seremi de Justicia y Derechos Humanos, cargo al que renunció para asumir el mando de la Delegación Presidencial de Arica y Parinacota.