La creadora de contenido alertó sobre una compleja situación que vive luego de una fijación que habría desarrollado el actor con ella. Antes fue blanco de críticas por un cuestionado comentario.
Esta semana el exactor Pablo Freire, recordado por su personaje de Brunito en la serie “Los 80”, reapareció en medio de una polémica luego de que se conociera sobre una “obsesión” con la reconocida influencer Bea Bravo.
La situación la dio a conocer el tiktoker Danilo 21 a través de un video donde expuso que el joven habría desarrollado una fijación con la creadora de contenido, luego de que ambos coincideran en sus estudios de derecho en la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso.
Bea Bravo es una influencer y creadora de contenido chilena con gran popularidad en redes sociales, especialmente en TikTok, donde cuenta con cerca de 390 mil seguidores.
Es conocida por compartir contenido relacionado al cuidado de la piel y el maquillaje, además de viajes y estilo de vida.
En cuanto a su vida personal, tiene 26 años y es oriunda de Viña del Mar, ciudad donde cursó estudios para ser abogada. A inicios de mayo reveló que estaba comprometida en matrimonio.
El año pasado Bea Bravo fue protagonista de una polémica en redes sociales a raíz de los comentarios que hizo en el podcast “Ni tan Distintas”, donde aseguró que darle una ducha de agua fría a los menores de edad era un buen método para cuando se portaban mal.
Sus comentarios despertaron varias críticas y la influencer tuvo que salir a aclarar sus dichos y disculparse por el tono que utilizó.
La influencer entregó detalles sobre la situación con el actor de “Los 80” a través de su canal de difusión en Instagram, donde detalló:
“Varias de ustedes ya me habían preguntado por interno y les había contado, no me pareció correcto publicarlo porque si bien es algo que me afecta a mí, se trata de una crisis de salud mental heavy de otra persona más que de mí misma”, contó.
En esa línea y sobre la situación de Pablo Freire expuso que “hay un compañero de universidad que está pasando por un mal momento y dentro de su descompensación él cree que nosotros tenemos una relación, que de hecho estamos casados y que mi relación con Fernando es un simple 'jueguito' al que colectivamente todos (incluyendo a su familia y sus amigos) nos hemos puesto de acuerdo porque estamos en contra de él”.
“Ya son reiteradas las ocasiones donde públicamente él hace insinuaciones a que nosotros tenemos algún tipo de relación de carácter romántica y sexual, cosa que no podría estar más alejada de la realidad, porque nunca fuimos ni realmente amigos, solo muy buena onda en los pasillos de la u y era”, contó.
“Es una situación que están intentando manejar profesionales médicos y su familia”, cerró la influencer.