Un nuevo conflicto se desató en Gran Hermano Chile, que dejó en llamas a los jugadores y enfrentó al sótano con la casa.
Todo comenzó durante esta tarde, cuando algunos de los ganadores de la semana se dieron cuenta que faltaban productos en su despensa.
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Fue así como Manuel, Miguel, Patricio, Chama, Michelle y Pedro realizaron un inventario y advirtieron que faltaban huevos, leche natural, leche de almendras, jamón, tarros de café y jugos en polvo, entre otras cosas.
Tras percatarse de los robos realizados por jugadores del sótano, los habitantes de la casa decidieron hacer justicia por sus propias manos.
La primera en tomar la iniciativa fue Michelle, quien aprovechó que los jugadores del sótano estaban durmiendo siesta para revisar el lugar.
Tras una inspección rigurosa, la brasileña descubrió parte de lo robado y lo llevó de regreso a la casa.
Lo propio hicieron Manuel y Chama, quienes optaron por esconder parte de sus reservas entre sus pertenencias personales.