Según el Ministerio de Salud de Irán, desde que comenzó la nueva ola de ataques por parte de Israel el pasado jueves, hay 430 ciudadanos fallecidos y cerca de 3.500 heridos.
Este sábado, Estados Unidos llevó a cabo un ataque por sorpresa en tres de las principales instalaciones nucleares iraníes, lo que se conoció como "Operación Midnight Hammer", que representa el mayor bombardeo con aviones B-2 de la historia del país.
El ataque fue sorpresivo dado que hace dos días atrás el presidente Donald Trump había asegurado que se tomaría dos semanas para evaluar si atacaba o no a Irán, dado que mantiene relaciones estrechas con Israel, desde donde aseguran que Irán estaba trabajando en un plan secreto para desarrollar un arma atómica, lo que ha sido descartadi por la ONU.
Pese a que Trump dijo que evaluaría entrar en esta guerra, este domingo el jefe de Defensa, Pete Hegseth aseguró que la operación fue preparada durante meses y tomó a Irán por sorpresa.
Por su parte, Dan Caine, jefe del Estado Mayor Conjunto detalló que Estados Unidos no había sufrido bajas por la operación, mientras que Trump advirtió: "Habrá paz o habrá una tragedia para Irán mucho mayor que la que hemos presenciado en los últimos ocho días".
El ataque de Estados Unidos fue ampliamente cuestionado a nivel internacional. Sin más, el secretario general de las Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, señaló: "En estos momentos críticos, es crucial evitar una espiral de caos. No hay solución militar. El único camino a seguir es la diplomacia. La única esperanza es la paz".
"Cualquier forma de intervención militar estadounidense sin duda tendrá como consecuencia un daño irreparable", había advertido el líder supremo iraní, ayatolá Alí Jamenei el pasado 18 de junio a través de un comunicado. Hoy, medios internacionales señalan que se encuentra refugiado en un bunker, mientras que EE.UU había señalado un día antes que sabía la ubicación exacta.
Este domingo, el parlamento de Irán pidió cerrar el Estrecho de Ormuz, donde pasa el 20 % del tráfico de petróleo por mar, una decisión que debe ser ratificada por el Consejo Supremo de Seguridad Nacional, lo que podría traer graves consecuencias a nivel mundial respecto de abastecimiento y valores de productos básicos.
Según el Ministerio de Salud de Irán, desde que comenzó la nueva ola de ataques por parte de Israel el pasado jueves, hay 430 ciudadanos fallecidos y cerca de 3.500 heridos.
Por otra parte, este lunes la televisión estatal iraní informó sobre el inicio de una operación en la cual atacaron la base militar estadounidense Al Udeid ubicada en Doha, Qatar, con seis misiles como represalia al ataque de la Operación Martillo de Medianoche.
Asimismo, también se reportaron explosiones en terrenos militares norteamericanos ubicados en Irak, sin embargo es Qatar donde Estados Unidos mantiene una mayor cantidad de bases y efectivos, por lo que las autoridades cerraron el espacio aéreo de forma temporal.
Del mismo modo, desde la Casa Blanca realizaron una reunión de emergencia para evaluar la situación y Qatar se reservó el derecho a responder.