Su caso salió a la luz tras una reciente entrevista con un medio británico en el cual cuenta su proceso de aceptación respecto al tema.
Hellen Schweizer es una mujer de 30 años que ha hecho noticia en su ciudad natal, Providence, en Estados Unidos, por identificarse a sí misma como una vampira energética.
Su caso salió a la luz tras una reciente entrevista con el medio británico Daily Mail, pero lo cierto es que hace años, cuenta ella, lidia con un proceso de aceptación.
"En 2016, conocí por primera vez el término (vampirismo), pero pasé años tratando de convencerme de que yo no era una porque mucha gente dice 'los vampiros no son reales'", inició.
Sin embargo, relata, algo cambió en 2022. En esa oportunidad, cuando se alistaba para grabar un video para redes sociales, se miró al espejo y dijo: "Esto no es un disfraz".
Desde ahí, dice haber iniciado el "viaje de aprendizaje y de aceptación de quién soy como vampira".
Ahora, Hellen Schweizer esgrime críticas para lo que acusa es la caricaturización de los vampiros. Por ejemplo, que solo pueden salir de noche o que el ajo es venenoso.
"Me encanta el ajo. Me encanta. Le puse ajo a todo. Estoy obsesionada", reconoce.
También hizo lo propio al revelar su relación con el Sol: "No estaré en llamas, pero para mí y muchos otros vampiros, el Sol nos drena y se necesita un poco de energía extra para devolvernos a la normalidad".
Conocido es el de que los vampiros chupan sangre, pero, en el caso de Schweizer, dice, solo "toma la energía" de la gente. Y siempre con su consentimiento.
De inmediato, añade: "La ponemos en nosotros mismos a través de prácticas de meditación". "Por ejemplo, es posible que me sienta agotada y que una amiga tenga demasiada. Me preguntará si puedo tomar un poco y sería un win-win para todos", declaró.