Un sujeto fue condenado a 43 años de cárcel tras el asesinato y posterior estafa que cometió a quien decía llamar su mejor amigo. El hombre de 30 años, según la justicia, dio muerte al joven de 25 y después sustrajo tarjetas bancarias y se hizo pasar por él a través del mismo celular de su víctima, logrando hacerse de millonarias sumas. Es la historia que sigue impactando a Melipilla, años después del asesinato de Ian Armijo.