Se había hablado de que autoridades trasandinas habían rechazado el cargamento de dosis. Sin embargo, el embajador chileno en Argentina, Nicolás Monckeberg, aclara que esto no es efectivo y que la eventual entrega de vacunas estaría dificultada porque el país vecino no tiene contemplado al laboratorio Sinovac dentro del plan sanitario.
La vacuna contra el COVID-19 fue causante controversia Argentina y Chile. Esto se remonta a fines de marzo, cuando el senador Carlos Bianchi hizo gestiones ante la Cancillería chilena para donar vacunas a la localidad de Río Turbio. "Nace porque el gobierno nacional argentino no ha podido llegar con las dosis y recién están vacunando a adultos mayores en el sur argentino", explica el legislador. Por lo mismo, se comunicó con el canciller Allamand para ver "si es posible hacer una donación". Se trataba de 15 mil dosis, en su mayoría para chilenos o familiares de chilenos que viven en ese sector ubicado a 30 km de Puerto Natales. El problema es que Argentina no tiene aprobada vacuna Sinovac. Con fecha del 22 de abril, un documento con la firma de Allamand llegó al a mesa del Senado informando que Pfizer y Sinovac no están contemplados en el plan de vacunación argentino. "No es efectivo que el gobierno argentino haya rechazado o haya dejado sin responder un ofrecimiento de donación por parte de Chile", aclara Nicolás Monckeberg, embajador chileno en Argentina. Lo mismo fue confirmado por autoridades trasandinas. El embajador nacional, sin embargo, no cierra ninguna puerta a una donación. En paralelo, la Intendencia de la Región de los Lagos recibió la solicitud para gestionar vacunas destinadas a chilenos residentes en Bariloche.