Los padres de los niños que fueron sedados en un jardín infantil de la fundación Integra en Til Til acusan que, a dos meses de iniciada la investigación del caso, aún no les informan qué tipo de drogas se suministró a los pequeños, por lo que persiste la incertidumbre respecto a las eventuales secuelas a su salud. Cinco funcionarias del jardín están bajo investigación y enfrentan querellas. El informe con Soledad Rodríguez.