Han pasado siete meses desde el naufragio de la embarcación Bruma, en el que siete tripulantes desaparecieron en alta mar tras una presunta colisión con el buque industrial Cobra de la empresa Blumar. Aunque la investigación para esclarecer las causas del hecho continúa, el buque será trasladado a comienzos de noviembre para labores de mantención. Esta decisión ha generado molestia entre las familias de las víctimas, quienes advierten que el movimiento podría alterar el sitio del suceso.