Mauricio Isla está a solo una firma de convertirse en el nuevo refuerzo de Universidad Católica. El Huaso está en Chile para realizarse los exámenes médicos y así volver a vestir La Franja, tal como lo hizo en las inferiores. Sin embargo, su llegada a la Precordillera se dan en medio de la sorpresa del medio futbolístico nacional, ya que es sabido que el bicampeón de América es un reconocido hincha del archirrival de la UC, la Universidad de Chile.
“Jugar en la U es uno de mis sueños. Le doy las gracias a la Católica, porque me hizo crecer, pero si no hubiese tenido problemas ahí, hubiese jugado en Chile y no me hubiese venido a Europa. Capaz que hubiese debutado en la Católica y jugado solamente en Chile. Tomé una decisión y fue la correcta”, declaró Isla a La Tercera en 2019.
Incluso el defensor entrenó en La Cisterna con el equipo laico vistiendo el uniforme azul.
“Siempre he sido hincha de la U y de Marcelo Salas, siempre fiel al Matador. Me gusta la U, porque la hinchada es fiel. La U ha pasado momentos muy difíciles, como ahora, y siempre están ahí. Es un sueño volver, pero quiero volver bien. Puede ser que, terminando el contrato, me quede un año más y luego vuelva. Pero yo quiero eso, quiero llegar a la U para ser un aporte, no para retirarme. Quiero estar contento conmigo mismo y que la gente esté contenta conmigo. Quiero cumplir este sueño, porque no he jugado nunca en Chile. Quiero estar en el equipo que me gusta; que mis amigos y mi familia me vean ahí”, comentó en esa misma entrevista.
Pero la U nunca realizó los movimientos necesarios para hacerse con los servicios del Huaso. Y ahí apareció José María Buljubasich y Ariel Holan para aprovechar la oportunidad.
No solo eso: durante los últimos años Isla había relajado su posición con respecto a un regreso a San Carlos de Apoquindo: “La Católica me hizo crecer como futbolista, y si me quieren ahí estaré trabajando al 100”, declaró en 2021.
