Impacto ha causado un registro que se viralizó en redes sociales y que muestra cómo un grupo de trabajadores y guardias de seguridad que prestan funciones en el Terminal de Buses Sur agreden a un hombre que habría sido sorprendido robando. Los guardias que fueron desvinculados de la empresa arriesgan penas de cárcel efectiva por el delito de tortura, que incluso podría superar los cinco años.