La embarcación que habría colisionado con la lancha Bruma, será trasladado hasta un lugar especial para realizar pericias, con miras a obtener nueva evidencia.
Gran conmoción ha causado la desaparición de la lancha Bruma y sus siete tripulantes el pasado 30 de marzo, cuando zarpó desde Coronel para realizar faenas de pesca artesanal.
Desde que estalló el caso, varias instituciones se han hecho cargo de las indagatorias. En un primer momento, eso incluyó a la Armada, pero luego escaló hasta la Fiscalía Regional del Biobío.
La investigación sumó un nuevo episodio este miércoles, ya que se confirmó que el buque Cobra, que habría colisionado con la embarcación siniestrada, será sacado del agua para ser investigado.
La persecutora Marcela Cartagena señaló que eso implica retirarlo y llevarlo a un dique seco, es decir, a una estructura con agua que después es drenada con fines de realizar mantenciones o arreglos.
En este caso, el buque Cobra será trasladado con la finalidad de hacerle una inspección, con especial atención a la estructura de la embarcación y su hélice.
¿La razón? Partes de la nave podrían servir para sumar nuevas evidencias y antecedentes en la investigación.
Todo este proceso se realizará con fondos públicos, de acuerdo a lo autorizado por el Fiscal Nacional Ángel Valencia, y se sumará a una prohibición del Juzgado de Garantía de Concepción para evitar que zarpe por 60 días.