Lo primero que nos cuenta sobre él, es que se considera un hombre tímido, sin embargo, con el correr de los años supo encontrar en el teatro la mejor manera para expresarse.
A pesar de su timidez, el actor Carlos Díaz llega a “El Discípulo del Chef” a sorprender en la cocina, nos cuenta que no tiene mucho conocimiento gastronómico, pero que su fuerte es el espíritu competitivo. “Lo voy a hacer estupendo, lo voy a dar todo, voy a ganar, quiero aprender, como soy obsesivo, quiero aprender, soy competitivo, me gusta ganar… Es cosa de jugar, pero si vamos a jugar hay que ganar po…”
Desde los 17 años que fijó desafíos en su vida y supo enfrentarlos. Adolescente supo reconocer su necesidad en ese momento y decidió viajar a Estados Unidos para reencontrarse, “Quería vivir mi vida solo, sin que nadie me conociera, lejos de mi familia, quería reconocerme… Me voy a ese lugar porque mi colegio (Saint George) tenía una congregación, tenía un colegio en distintos lugares del mundo y este precisamente era el Saint Joseph, así que el colegio aceptó, buscaron una familia que nos acogiera y nos fuimos.”
Estudió toda su vida en el “Saint George” pero cuando llegó de Estados Unidos, solo podía pensar en una cosa, entrar a estudiar teatro, por lo que tuvo que enfrentar a su familia, quienes en un principio no estaban muy de acuerdo, pero siempre lo apoyaron. Fue así como Carlos Díaz entró a la escuela de teatro de la Universidad de Chile siendo considerado uno de los mejores en las audiciones.
Pasó muy poco tiempo y fue el mismo actor Alfredo Castro (En ese tiempo profesor de la carrera), quien lo incentivó para que se presentara en un casting de Canal 13, que sin duda lo llevó a la cima. “En ese tiempo, yo estaba en segundo año, imagínate el Alfredo era como un Dios en la escuela, me dijo: “Oye Carlos están haciendo un casting en canal 13, ¿Por qué no vas? Yo primero dije, Alfredo me habló, sabe que existo, así que me fui al canal hice la prueba, yo era flaquito, no me tenía mucha fe y empecé a pasar las etapas y quedé”
Fue solo cosa de tiempo para lograr su consolidación en la actuación, sin embargo, una de las situaciones que más le sorprendió en la vida, fue esta faceta de docente que apareció sorpresivamente y que con el tiempo, perdura. “Empecé a hacer clases por casualidades de la vida, estaba haciendo teatro y me llama Rodrigo
Bastidas para una obra y empecé a trabajar ahí, al tiempo me dice “Charly tú tienes que hacer clases y le dije que OK pero si es que soy tu ayudante”
Profesor, director de Universidades, ha viajado por el mundo experimentándose e impartiendo clases, pero su mejor faceta es la de esposo y padre. Está casado con la actriz Camila Videla hace 21 años y tiene dos hijos, Gaspar de 16 años y Sara de 5 años, “Yo creo que con el nacimiento de mis hijos descubrí lo que significa la palabra sublime en su esplendor”.
Habla con ternura cuando se refiere a sus hijos, se considera super aprensivo, pero, lo que más destaca de su personalidad, es la perseverancia y las ganas de siempre estar aprendiendo o haciendo algo. Viene con ganas de competir y asegura que su pasada por este programa, no pasará desapercibida.
