Sin duda, uno de los momentos televisivos del año ocurrió en la última ceremonia de los Premios Oscar. Ahí, el actor Will Smith golpeó a Chris Rock por una broma en contra de su esposa Jada Pinkett Smith. Esto, le trajo una serie de coletazos al protagonista de “King Richard”, inclusive una profunda crisis matrimonial. Sin embargo, estos problemas se vienen arrastrando hace años.
La controversial pareja se conoció en 1994, cuando Jada audicionó para ser parte del programa “El Príncipe del Rap”, en el cual Smith era el protagonista. Pese a no obtener el papel, inmediatamente congeniaron, aunque el actor estaba casado con Sheree Zampino, con quien tenía un hijo. En 2018, en el programa Red Table Talk, Jada reconoció este hecho y pidió disculpas a la mujer que, hasta ese momento, compartía un vínculo con Smith.
En diciembre de 1997, los actores contrajeron matrimonio. Sin embargo, Pinkett aseguró que ella nunca tuvo la intención de casarse. “Estaba bajo tanta presión, siendo una actriz joven y estaba embarazada y no sabía qué hacer. Nunca quise casarme. Realmente nunca lo quise. Estaba tan enojada porque me obligaron a casarme, tan enfadada, que caminé todo el maldito pasillo hacia el altar llorando”, recordó en el programa antes mencionado.
De esta forma, en 1998 nació su primer hijo, Jaden y en el año 2000 nació su hija Willow. Pese a esto, la actriz no era del todo feliz, ya que sentía que estaba viviendo en una realidad poco auténtica. Por esta razón, debieron repensar su matrimonio. En conversación con revista GQ, Smith, contó que Jada jamás creyó en una relación convencional.
“Durante gran parte de nuestra relación, la monogamia fue lo que elegimos, sin pensar en la monogamia como la única forma de relacionarnos. Nos hemos dado confianza y libertad, con la convicción de que todo el mundo tiene que encontrar su propio camino”, relató Will sobre su relación sentimental.
Durante su aniversario 22, cuando Jada explicó que “podemos hacer ambos lo que queramos, porque confiamos el uno en el otro. Eso no significa que estemos en una relación abierta, eso significa que estamos en una relación madura”.
En 2020 la pareja vivió una de sus más grandes crisis: La actriz confesó que se involucró con el cantante August Alsina, amigo de su hijo y 21 años menor que ella. En la oportunidad, el artista afirmó que contaba con la venia de Will. El actor reconoció saber de la aventura, pero que él no había entregado su consentimiento. Finalmente, Jada dejó atrás toda polémica. “La única persona que puede dar permiso en esa circunstancia soy yo”, afirmó la actriz.
Pese a esta situación, la pareja reconoció que lo vivido los unió. “Una de las cosas por las que estoy profundamente agradecida en todo este proceso entre tú y yo es que hemos llegado a ese nuevo lugar de amor incondicional”, detalló Pinkett.
Sin embargo, con lo sucedido en los Premios Oscar, todo parece haberse derrumbado. Según una fuente cercana a la pareja, Jada se habría molestado por lo sucedido. “Fue en el calor del momento y fue él quien exageró. Ella no es una de esas mujeres que necesitan ser protegidas. No necesitaba hacer lo que hizo, ella no necesitaba protección. Es una mujer fuerte, una mujer con opinión y puede luchar sus propias batallas, pero ella estará a su lado”, comentó la persona al medio US Weekly.
Por ahora, hay informaciones que aseguran que Smith se encuentra en un centro de rehabilitación para tratar lo que ocurrió y también todas las repercusiones que le trajo. En tanto, Jada, en solitario, apareció nuevamente en público hace unos días en la inauguración del nuevo Centro de Artes Escénicas Rhimes.
