En diciembre del 2007 María Soledad Lapostol encontró la muerte tras intentar vender su vehículo, la mujer fue secuestrada y luego hallada sin vida con 4 balazos en el cuerpo.
Al principio se hablaba de un psicópata como el responsable del crimen, debido a la frialdad con la que llevó a cabo el delito. Las imágenes del ascensor de la oficina de la víctima fueron claves para dar con el paradero de Luis Araya Galaz quien durante varios días mantuvo escondida en la maletera de su propio vehículo a la víctima.
Araya secuestró a la mujer mientras supuestamente ambos irían a ver un mecánico para concretar la venta del vehículo. Luego de esto la llevó a un motel donde le quitó sus tarjetas de crédito, le hizo sacar todo su dinero y luego le quitó la vida. El sujeto, ya contaba con antecedentes penales previos pero había quedado en libertad por buena conducta.
En la entrevista que Araya dio al Diario La Cuarta insistió en su inocencia, pese a que todas las pruebas apuntan a que él habría cometido el crimen y aseguró estar pagando en estos momentos por sus faltas cometidas con anterioridad.
