Jueves 29 de septiembre de 2016 | 15:41
El budismo hoy es casi inexistente en su lugar de origen, India. Emigró hacia China y Japón, hacia el sudeste asiático, Malasia, Laos, Camboya, y especialmente a Tailandia, donde es la religión oficial del Estado.
Tailandia, sin embargo, es también un centro del turismo sexual, el cual genera miles de millones de dólares para la economía local, además de toda clase de abusos y perversiones.
Resulta muy fácil encontrar, a plena luz del día, toda clase de pedófilos o confundirse con decenas de travestis y transexuales, a quienes en Tailandia llaman ladyboys o kathoey.
Impresiona la edad de las chicas, ya que no parecen tener más de 15 ó 16 años. Me cuentan que la mayoría viene de zonas rurales, y que en la prostitución pueden ganar hasta mil dólares mensuales, cifra que sus familias ganan en un año de buena cosecha.
JORGE SAID