Jean Philippe Cretton: Una conversación con el animador de la segunda temporada de Yo Soy Chile

Ad portas del estreno de la segunda temporada del estelar de imitadores, dialogamos con Jean Philippe Cretton: Su 2020 y los desafíos a enfrentar fluyen en la siguiente entrevista.

En marzo, Yo Soy con Millaray
Me siento bastante cómodo animando con ella, ya hemos tenido algunas experiencias trabajando juntos y la música es algo que nos une harto. Estoy emocionado por el proyecto, espero que una a la familia frente a la televisión.

Estará Antonio Vodanovic...
Sí, tiene un nivel de recorrido y experiencia que será muy útil. Es duro y categórico, pero creo que es lo que hace falta en este estilo de competencias.

¿Esperas ver a algún imitador en especial?
Un Kurt Cobain. Estoy ansioso por encontrarme con un Kurt Cobain en esta temporada, me encanta Nirvana. Pero también me gustaría ver distintos géneros musicales.

¿Como cuáles?
Desde el metal hasta un folklor latinoamericano. Lo más lógico es que se repita mucho el trap y que veamos a muchos Bad Bunny.

¿Qué hay para nosotros este año?
Estoy en un proyecto musical con Mauricio Jürgensen para revivir algunas canciones del rock de los 90s en formato acústico. Él vino a Tu vida Tu Historia y ahí cantamos Black de Pearl Jam; se generó una conexión especial.

¿Conciertos y todo?
Vamos a estar el 14 de febrero en la Casa de la Música en Concepción y el 28 en el Casino Enjoy de Chiloé.

Pero, y el trabajo...
Es compatible, de hecho, me tiene bastante contento. Nos juntamos a ensayar en mi casa o en la de él y ahí surgen conversaciones increíbles.

Háblame de Crettino
Estoy a punto de estrenar mi cuarto álbum con Crettino, mi proyecto solista. Ya tengo un 70% avanzado, se llama Anima Mundi y se trata acerca del tiempo y todos los vericuetos que trae consigo.

Oye Yanfi, ¿Por qué la música? ¿Tus viejos?
No, no tengo esa típica historia de los papás fanáticos del rock que le muestran Led Zeppelin al hijo. No sé cómo enganché, creo que fue algo mágico.

¿De chico?
A los nueve me empezó a interesar la vida de los cantantes y me imaginaba en los videoclips. Apenas aprendí a tocar guitarra me lancé en el proceso creativo. Estudié en el Calasanz y ahí con mis amigos fuimos pioneros en hacer pequeñas tocatas en los camarines del colegio, un poco clandestinas.

¿Clandestinas?
Los colegios no pescan mucho lo artístico, tuvimos una especie de suerte.