Natalia Ciuffardi ha hecho noticia en los últimos días por el encarcelamiento de su marido, un multimillonario hondureño que está condenado por corrupción. La nueva geisha chilena está acusada de lavado de dinero, dado que su marido le proveía una mesada de 3 millones de pesos y compraba propiedades a su nombre.
Cuatro departamentos en Honduras, dos casas en la comuna de La Florida y una parcela en el balneario nacional de El Tabo, son parte del patrimonio que imputa el tribunal hondureño como parte de una estrategia de lavado de dinero por parte de Mario Zelaya Rojas, el multimillonario centroamericano que ha llenado de lujos y riquezas a la escort chilena.
En 2011 Natalia aún se desempeñaba como escort. Fue detenida por cobrar una tarifa de más 300 mil pesos en un nightclub chileno aquel año. Finalmente salió libre y conoció al hombre que la hizo rica y, que a pesar del presidio, le permitió crear un patrimonio inimaginablemente robusto.
