Julia Fernandes reveló que recibe pensión de expareja por su mascota: “Tiene que pagar todo”
La modelo también contó que su perrita asiste tres veces por semana a un “colegio de mascotas”, donde la van a buscar a su casa y pasa el día socializando con otros perros.
Sábado 15 de noviembre de 2025 | 14:42
Julia Fernández reveló que su expareja le paga una pensión de alimentos por la perra que adoptaron cuando estaban juntos. Según contó, como ella se hace cargo del animal a tiempo completo, su ex debe cubrir todos los gastos: tratamientos, comida y cualquier cuidado necesario.
El tema surgió durante su participación en el programa Liberamos al aire de Porcel TV, donde sorprendió a los panelistas al describir un acuerdo similar al que suele aplicarse con hijos humanos.
Ver también: “Me obsesiono”: Nano Calderón reveló cómo compró su millonaria casa estando en quiebra
"Se queda una semana allá y una semana acá"
La modelo brasileña explicó que estuvo cuatro años en una relación y que, durante ese tiempo, ambos adoptaron a la mascota, por la cual hoy mantienen un régimen de tuición compartida.
“Yo tuve una perrita con mi ex y nos separamos después de cuatro años. Tenemos tuición compartida, se queda una semana allá y una semana acá. Le pido la pensión de la mascota”, aseguró la modelo.
En esa línea, Julia explicó que su expareja “tiene que pagar todo de la perrita y si necesito una nana en la casa también me la paga, porque cuando estábamos juntos yo no quería esta raza y él quería…”.
Sin embargo, todo cambió cuando su expareja empezó a disponer de menos tiempo debido a sus responsabilidades laborales: “Como él no tiene mucho tiempo, trabaja mucho, yo le dije: ‘Yo cuido completamente al perro y tú pagas todo. Compartimos la perrita’".
En esa línea, la exchica reality también reveló que “conseguí un colegio para la perra, son tres veces a la semana. Llegan en la mañana a las 8:00, la buscan en un furgón con todos los perritos (…) La llevan a un local que tiene una piscina para ellos en verano, todo es maravilloso, yo amo”.
“Ella cada vez que ve al chico se vuelve loca. La mando con almuerzo, le hago una merienda. Llega agotada, feliz”, finalizó Julia.