"Es lo peor que me ha pasado": Raquel Argandoña vivió grave accidente doméstico al intentar "dieta del pollo"

La presentadora de televisión relató el tenso momento sufrido tras atragantarse, lo que le generó una terrible angustia. "Fue espantoso. Sentí que me moría", dijo.

Martes 28 de febrero de 2023 | 22:59

La reconocida presentadora de televisión nacional, Raquel Argandoña, sufrió un grave accidente doméstico el pasado lunes 27 de febrero, luego de atorarse mientras estaba sola en su departamento. Según reveló la propia empresaria, todo se dio cuando quiso cumplir parte de la "dieta del pollo", la que ha seguido al pie de la letra y que le ha permitido bajar poco más de cinco kilos en pocas semanas. "Fue terrible, terrible, terrible. Estuve a punto de morir. No podía respirar (...) Cuando vives sola no te sientas en la mesa. Comes parada y me estaba echando crema", contó a Las Últimas Noticias.

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La influencer se distrajo por un segundo y se atoró con un pollo grill, lo que le pudo haber costado de la vida. De hecho, señaló que "me acuerdo y no se lo doy ni a mi peor enemigo". "Fue espantoso. Sentí que me moría, entonces salí a pedir ayuda al pasillo, pero no había nadie. Llamé al conserje que me decía '¿Aló, aló?' y yo no podía responder (porque) cuando estás atorada la voz no te sale", agregó.

"Estaba lista"

El citado medio precisó que Argandoña no ocultó sus lágrimas al recordar el momento. "Imagínate que de todo lo que me ha pasado en la vida, que han sido varias cosas, esto es lo peor que me ha pasado", dijo. Consultada sobre cómo logró volver a respirar, la afectada sostuvo que "me empecé a poner roja. Me metí la mano a la boca y nada. Tenía la cara y la cabeza hinchadas. Dije: 'Ya, me muero'. Estaba lista. Me afirmé de la taza del baño y ahí parece que apreté algo (al abdomen) porque me hinqué". "Ahí sentí que se hizo un espacio en el que puede respirar un poco. Estuve cinco horas con otra voz que no era la mía. Pienso en lo que pasó y lloro, porque fue tan terrible que no me entrara el aire. Pensé en meterme un cuchillo o un lápiz", añadió. Por último, la presentadora de 65 años admitió que ha reflexionado sobre su rutina, reconociendo que "me gustaría disfrutar más de lo que he trabajado, nada de cosas para el futuro. Quiero pensar más en mí y disfrutar. ¿Para qué trabajar tanto? ¿Para ser la más rica del cementerio?"