Fueron 11 años de preparación los que tomó el proyecto de la Administración Nacional del Espacio de China, que logró posar la sonda Chang'e 4 en la cuenca de Aitken, ubicada en el polo sur del satélite. Entre otros objetivos, ver la superficie, cómo son los relieves y poder tomar muestras para poder analizar cuál es su composición, lo que podría dar luces de la formación y evolución de este satélite.